Colombia
Las personas que han sufrido un daño por una mala práctica médica cuentan con pasos legales definidos para buscar reparación, desde la conciliación hasta la vía judicial y disciplinaria.
Publicado:
Por: Juan Manuel Arias Montenegro
Creativo Digital
En Colombia, las personas que consideran que han sido víctimas de acciones u omisiones de un médico y cuyo estado de salud ha empeorado pueden acceder a varios mecanismos legales para denunciar y buscar reparación.
El sistema colombiano establece rutas claras para enfrentar situaciones de presunta negligencia médica, incluyendo procedimientos para conciliación, denuncia ante entidades judiciales y quejas disciplinarias.
El proceso para reclamar daños por negligencia médica comienza con la recolección de todas las pruebas disponibles que demuestren la mala actuación por parte del personal de salud.
Esto incluye la historia clínica y posibles dictámenes de expertos médicos, los cuales resultan fundamentales durante cualquier investigación judicial.
Una vez recolectada la documentación suficiente, el primer paso suele ser solicitar una conciliación, razón por la que en Colombia existen Centros de Conciliación privados y públicos en los que se puede intentar un acuerdo con la entidad o el profesional involucrado.
En menester acotar que los centros privados cobran una tarifa, mientras que los públicos, así como los consultorios jurídicos de universidades, ofrecen servicios gratuitos en la mayoría de los casos.
Si la conciliación no prospera, la orientación de un abogado especializado resulta esencial, por lo que la vía legal varía según el tipo de responsabilidad:
Para presentar demandas ante los jueces civiles o administrativos, es obligatorio actuar con abogado, pues durante el proceso, la autoridad judicial revisa las pruebas, escucha las partes y emite una sentencia sobre la posible responsabilidad del médico o la entidad implicada.
Quien demande perjuicios materiales debe aportar pruebas concretas, porque una reclamación sin sustento puede derivar en sanciones económicas.
El Tribunal de Ética Médica del lugar donde se registraron los hechos es el órgano encargado de recibir quejas disciplinarias contra los médicos por faltas éticas, no se exige la intermediación de abogado, aunque se puede contratar uno.
Si la persona no cuenta con recursos económicos, la Defensoría del Pueblo puede facilitar un defensor desde el inicio de la acción.
Para otros trámites pueden intervenir:
En el caso de demandas contra entidades públicas, existe la opción de presentar una acción de Reparación Directa ante los jueces administrativos, solicitando indemnización por daño material o moral.
Las consecuencias para el profesional de la salud pueden ser disciplinarias, patrimoniales o penales, dependiendo de la gravedad de la falta, aunque los pacientes deben respetar los plazos legales para presentar denuncias y demandas.
Cuando se trata de un médico de una entidad pública, la conciliación debe realizarse primero en el Centro de Conciliación de la Procuraduría antes de acudir a la vía judicial.
La negligencia médica se entiende en Colombia como el acto médico realizado de manera descuidada, que pueda lesionar gravemente al paciente y sus familiares. Entre los eventos más reportados figuran la omisión de procedimientos necesarios y la negación injustificada de medicamentos.
Para cualquier denuncia, la historia clínica y el dictamen pericial son documentos de prueba esenciales, pues la adecuada presentación de respaldos al Tribunal de Ética Médica favorece el curso de la investigación y la posible sanción, en caso de confirmarse la falta profesional.