Colombia
El artista que revolucionó el vallenato, pese a no gustar de él, cumpliría años este 9 de junio. Descubre su historia, su balance entre la medicina y la música, y cómo creó la nueva ola del vallenato.
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Por: Erika Mesa Díaz
Creativa Digital
El cantante Kaleth Morales cumpliría años este 9 de junio. Aunque su legado musical está ligado al vallenato, género que popularizó su padre, Miguel Morales, él mismo confesó en vida que no sentía afinidad por este ritmo.
Su carrera fue un equilibrio entre la medicina y la música, en la que impuso un estilo innovador que transformó la escena vallenata para siempre.
Kaleth Morales admitió en entrevistas que el vallenato no era de su agrado. Incluso, cuando escuchaba este género en una fiesta, sentía rechazo: "Me colocaban un vallenato y decía, 'me están echando'". Solo escuchaba con gusto la música de su padre, fundador de Los Diablitos; esa era la única excepción a su aversión inicial.
Con el tiempo, su perspectiva evolucionó, pero su primera inclinación musical fue hacia otros ritmos. La salsa captó su atención desde joven y a los 16 años empezó a componer. Aunque el vallenato terminó por ser parte esencial de su trayectoria, es cierto que lo hizo a su modo.
Todos los riesgos creativos y líricos que tomó lo terminaron convirtiendo en el rey de la nueva ola, el precursor del sonido actual del género, con sus influencias de pop y su no pertenencia a ninguno de los cuatro ritmos canónicos.
Para Kaleth, la música era un vehículo de emociones. "Uno transmite muchas cosas a través del canto", explicó. Valoraba su poder para cambiar el ánimo de las personas, alegrar a quien estuviera triste o conectar con el público.
Kaleth Morales estudió medicina en la Universidad del Sinú, una carrera que le demandó gran dedicación. "Es complicado", reconoció, sobre todo en sus últimos semestres. Priorizó lo académico, pero en su tiempo libre se dedicó a la música y logró un equilibrio que pocos alcanzan.
Su disciplina le permitió destacar en ambos campos. Mientras avanzaba en medicina, compuso éxitos como 'Sin tener defensas' y 'Todo de cabeza*, y demostró que su talento trascendió géneros y profesiones.
Kaleth Morales dejó un legado que desafió las convenciones. Aunque no amó el vallenato, lo reinventó. Su vida, truncada a los 21 años, fue una mezcla de contradicciones y logros, que nos recuerda que el arte puede florecer incluso fuera de los gustos personales.
