Colombia
Entre emociones y vallenato, Silvestre Dangond le rindió homenaje a Carlos Bloom, su primer mánager y figura clave en su carrera.
Publicado:
Por: María Paula Vargas Rodríguez
Creativa Digital
En la tercera noche de su espectáculo en Valledupar, Silvestre Dangond dejó de lado los acordes para abrir su corazón ante miles de fanáticos. Entre lágrimas, el artista vallenato agradeció públicamente a Carlos Bloom, su primer mánager y una figura clave en su ascenso musical.
Carlos fue el primero que creyó en mí,
Expresó visiblemente conmovido, mientras el público lo ovacionaba. El momento fue tan íntimo como poderoso: Silvestre, desde el escenario, revivió lo que significó Bloom en su carrera, no solo como guía profesional, sino como una figura casi paternal.
“Desde Miami no te veía, que fue cuando me despedí de ti… gracias Charles. Aquí tienes a tu pelao, al que criaste, al que le diste este tamaño, al que le jalaste las orejas todo el tiempo para poder lograrlo”, dijo Dangond, con la voz entrecortada, en una muestra de cariño y reconciliación.
Pero el mensaje fue más allá de los logros y la fama: “Fuiste esa persona que nunca va pa' atrás. Hoy agradezco todo, todo, todo… y ya sané todas esas heridas. Ahora te veo y te amo más”, confesó el cantante, provocando una oleada de emoción en el público.
Carlos Bloom, presente en el evento, respondió con un abrazo y palabras cargadas de afecto:
Yo a ti te amo mucho, pelao, muchísimo. Solamente palabras de gratitud y sentimientos bonitos.
El mánager también dedicó un mensaje al “silvestrismo de base”, ese grupo de seguidores que ha acompañado a Dangond desde sus inicios: “Gracias a ese Silvestrismo razo, el que nos ayudó a que Silvestre fuera lo que es hoy: el número uno, el más grande de la música vallenata”.
Este emotivo reencuentro no solo cerró una etapa, también reafirmó que detrás del éxito hay lazos humanos que, con el tiempo, pueden sanar y fortalecerse.
Al final, Dangond alzó a Carlos Bloom en brazos, casi como un hijo grande que levanta con orgullo al padre que lo formó. El gesto arrancó entre los presentes.
“Te saludo Ivonne, a Carlos Giraldo, a Carlos Daniel, y a Lucianita”, dijo Dangond al micrófono, en un guiño cariñoso a la familia de Bloom.
Poco después, acompañado por Juancho De La Espriella, Carlos Bloom se despidió del escenario mientras sonaba 'El Malcria'o', uno de los sencillos más representativos de El Último Baile.
Fue una noche cargada de música y memorias, donde el vallenato no solo fue protagonista: también lo fueron los abrazos y el amor que perdura a pesar del tiempo.
Una noche en la que, más allá del espectáculo, triunfaron la gratitud, la reconciliación y la familia.