Colombia
Con profundo pesar, el equipo de Rubby Pérez compartió un mensaje de gratitud por el cariño de sus seguidores, mientras enfrentan este momento de inmensa tristeza tras su fallecimiento.
Publicado:
Por: María Paula Vargas Rodríguez
Creativa Digital
El miércoles 9 de abril se emitió el comunicado oficial sobre el fallecimiento de Rubby Pérez, ícono del merengue. En la publicación, compartida a las 7 de la mañana en su cuenta oficial de Instagram, su equipo expresó su gratitud por el apoyo recibido en medio del duelo:
“Con profundo pesar informamos el fallecimiento de nuestro querido Rubby Pérez. Agradecemos sinceramente todo el amor, apoyo y solidaridad que hemos recibido en este momento tan difícil para sus familiares, amigos y seguidores. Su legado musical y humano vivirá para siempre en nuestros corazones. Paz a su alma.”
La trágica noticia ha conmocionado al mundo de la música. Rubby Pérez, cuyo nombre real era Roberto Antonio Pérez Herrera, falleció el 8 de abril de 2025 a los 69 años, tras el colapso del techo de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, donde ofrecía una presentación. El accidente dejó al menos 110 personas fallecidas.
Nacido el 8 de marzo de 1956 en Bajos de Haina, República Dominicana, Rubby soñaba con ser beisbolista profesional. Sin embargo, un accidente automovilístico a los 15 años cambió el rumbo de su vida y lo llevó a descubrir su verdadera pasión: la música. Estudió en el Conservatorio Nacional de Música de Santo Domingo y comenzó su carrera profesional en 1978.
Su gran salto a la fama ocurrió en 1982, cuando se unió a la orquesta de Wilfrido Vargas, donde brilló con canciones como “El Africano” y “Volveré”. En 1987 emprendió su carrera como solista, consolidándose con éxitos inolvidables como “Buscando tus besos” y “Dame veneno”, que lo convirtieron en una de las voces más queridas del merengue.
Hoy, el género pierde a una de sus figuras más emblemáticas. Pero su voz, su energía en el escenario y su legado musical seguirán vivos en el corazón de millones de seguidores alrededor del mundo.