Colombia
Las bodas ganadoras se celebrarán en Barranquilla, Bogotá y Cartagena en donde podrán bailar al ritmo de la reconocida agrupación dominicana.
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Por: Juan Manuel Arias Montenegro
Creativo Digital
En Olímpica Stereo queremos que las parejas que se casan en Barranquilla, Bogotá o Cartagena, tengan la oportunidad de vivir un show exclusivo de Rikarena, una de las agrupaciones icónicas del merengue, la noche de su boda.
En ese contexto, más allá del premio, celebrar con merengue en la boda tiene un significado especial en la cultura colombiana y representa tradiciones que unen a las parejas y a las familias.
El concurso está dirigido a quienes tengan programadas sus bodas programadas en las siguientes fechas:
Para participar, las parejas deben enviar la palabra BODASALKA al número de WhatsApp de su ciudad y contar la historia de su propuesta de matrimonio.
La historia seleccionada contará con la presentación de Rikarena en la celebración, por lo que es indispensable disponer de un espacio adecuado para la tarima y cumplir con las condiciones de lugar y fecha establecidas.
El evento se convierte en una gran oportunidad para revivir el merengue en las bodas y profundizar en su significado.
El merengue tiene un origen folclórico dominicano y, de acuerdo con Héctor Fernando Tinjacá Cárdenas bailarín profesional, docente universitario de la Universidad Pedagógica de Colombia y miembro de la compañía Enamoradanza, lo que actualmente se baila fuera de República Dominicana corresponde a fusiones y adaptaciones del merengue tradicional.
En su forma original, el merengue se asocia con vestuarios típicos, como faldas largas y turbantes en las mujeres, y sombreros y guayaberas en los hombres.
Pero, a lo largo de los años, este ritmo se mezcló con otros géneros caribeños y latinoamericanos, por lo que las décadas del 80 y 90 consolidaron la popularidad del merengue en Colombia mediante exponentes como Juan Luis Guerra, Wilfrido Vargas y las Chicas del Can, haciéndolo imprescindible en fiestas y reuniones familiares.
Las ciudades en Colombia donde este género arraigó con más fuerza fueron Barranquilla, Bogotá, Medellín y Cali, aunque llegó principalmente por la Costa Atlántica, las influencias se extendieron por rutas comerciales también desde el Pacífico, permitiendo que nacieran agrupaciones locales de merengue.
Tinjacá explicó que la clave del merengue está en la marcación sencilla en compás de 2/4, en el que la secuencia básica alterna los pies: derecha, izquierda, derecha, izquierda.
Entre las figuras tradicionales se incluyen abrir, cerrar, vueltas y el paso “mambo”, así como el “cajoncito” (dos pasos adelante y dos atrás).
Uno de los errores frecuentes se produce al pensar que bailar merengue equivale a caminar, lo que resta cadencia y movimiento a la cadera y los hombros.
Otro error reconocido es utilizar el aplauso para acompañar el ritmo, pues, aunque común en fiestas familiares colombianas, palmear no forma parte del merengue tradicional; asimismo, al girar o dar vueltas, resulta importante coordinar el momento de soltar y tomar las manos para evitar enredos.
En cuanto a la postura, el movimiento de caderas representa la influencia africana del merengue, razón por la que la naturalidad en el manejo de brazos y caderas aporta el aire tropical del baile.
Por el contrario, pararse rígido o intentar mantener el torso o las rodillas completamente quietos limita la expresión del ritmo.
El merengue tradicional de salón, el folclórico y el moderno se diferencian por el contexto, la vestimenta y las figuras bailadas.
En Colombia, el merengue se fusionó con otros géneros y escenarios populares, favoreciendo su adopción en fiestas familiares sobre los ambientes de salón elegante, incluso, puede bailarse en pareja o en grupo, por lo que para quienes planean un espectáculo especial para la boda, es posible montar coreografías grupales; sin embargo, la tradición familiar privilegia su baile en pareja durante la fiesta.
El baile social, especialmente el merengue, cumple una función de crear vínculos y fortalecer la relación de pareja.
Tinjacá resaltó que saber bailar juntos contribuye a la armonía en la relación y al disfrute compartido de eventos sociales, por lo que aprender a bailar merengue requiere dedicación, especialmente si la intención es presentar una coreografía, para la cual recomienda al menos un mes de ensayos; sin embargo, para animarse a bailar en la boda, bastan algunas clases o tutoriales y practicar los pasos básicos.
El merengue no solo anima las fiestas, sino que se convierte en un momento de conexión para la pareja, dado que la tradición marca que un matrimonio en Colombia incluye esta danza, consolidando el sentido familiar y festivo de la celebración.
Más información sobre el concurso y videos tutoriales de cómo puedes aprender a bailar merengue están disponibles en las plataformas digitales de Olímpica Stereo.