

Colombia
Los asistentes al Cundinamarca Fest pueden acceder a tarifas especiales para visitar una de las minas salinas más grandes del país.
Publicado:

Por: Juan Manuel Arias Montenegro
Creativo Digital

El stand de la Catedral de Sal de Zipáquirá, considerada la primera maravilla de Colombia, ubicado en el pabellón Cundinamarca para el mundo, destaca en el Cundinamarca Fest, que se realiza del 13 al 16 de noviembre de 2025 en el Parque Simón Bolívar.
A tan solo una hora de Bogotá, este templo subterráneo no solo es un referente de la fe y el patrimonio histórico regional, también un epicentro de experiencias turísticas innovadoras y actividades para todos los viajeros.
Descender a la Catedral de Sal implica recorrer una memoria ancestral tallada a 180 metros bajo tierra, en el que visitantes de todo el mundo pueden contemplar la monumental arquitectura y las esculturas que perviven desde la antigua catedral, inaugurada en 1954, como el Altar original, trasladado posteriormente al nuevo templo en 1995, una pieza fundacional que sigue uniendo el pasado de devoción minera con la espiritualidad contemporánea de los fieles y turistas.
Según explicó Yenny Lozano, ejecutiva corporativa de la Catedral de Sal, el recinto es además “el segundo templo más impresionante del mundo y el único subterráneo en su clase”.

La experiencia comienza al acceder a una verdadera “ciudad bajo tierra”, dado que los visitantes atraviesan las tres naves centrales, en las que se encuentra la cruz más grande bajo tierra.
El recorrido guiado permite conocer las diferentes zonas religiosas y comerciales, así como museos, monumentos, áreas de gastronomía y espacios de bienestar.
Entre los atractivos principales, Lozano señaló el Museo Monumental 180 Metros, inaugurado hace año y medio y que alberga 22 esculturas en mármol y sal creadas por artistas internacionales.
También hay un cine 3D que relata la historia de la explotación de sal en Zipáquirá, o el espejo de agua, una de las vistas preferidas por los visitantes.
Otra de las innovaciones es el “spa” dentro de la Catedral, que ofrece servicios de bienestar en un entorno inusual y relajante bajo tierra.

La Catedral de Sal ha entendido que debe renovar de forma constante sus propuestas para el público, incluso, Lozano señaló que entrar al recinto se siente como "si fuera la primera vez”, ya que la entidad está “siempre innovando, construyendo más y mejorando para estar a la vanguardia”.
Entre las actividades más destacadas está la Ruta del Minero, una experiencia inmersiva incluida en el pasaporte prémium, en la que los visitantes se internan en los socavones, reciben picas y descubren, a través de una vivencia sensorial y ludificada, cómo era el trabajo de los mineros en la construcción original de la iglesia subterránea.
El recorrido incluye un show de luces que simula explosiones mineras y está diseñado para que los asistentes experimenten lo que vivieron quienes tallaron la catedral en roca salina.
Otra propuesta singular es la biciexperiencia, un plan con fechas específicas, por lo general en modalidad nocturna, en el que los visitantes recorren en bicicleta los túneles de la Catedral y disfrutan de refrigerios y actividades de integración al finalizar.
De acuerdo con Lozano, esta actividad ha tenido gran aceptación tanto en el público nacional como extranjero: “Cada vez estamos creciendo más con esta experiencia”, aseguró.
Para información y reservas de la biciexperiencia, los interesados pueden comunicarse con la asesora Lady Gómez al 3160177549 o al correo electrónico ejecutivoventas4@catedraldesal.gov.co.

La oferta de ingreso a la Catedral se organiza en pasaportes con diferentes niveles de experiencia y tarifas diferenciadas:
Los niños menores de 4 años ingresan gratis, mientras que los adultos mayores acceden a una tarifa preferencial de $57.000.
Plan Estándar: a lo anterior suma un city tour por el centro histórico de Zipaquirá a bordo de un tranvía y el acceso al Museo Egipcio Tutankamón, instalado dentro de la mina, un museo temático egipcio como un valor agregado a la visita subterránea.
Plan Prémium: con un costo de $108.000, este pasaporte reúne todos los beneficios de los anteriores e incorpora el acceso a la Ruta del Minero y al muro de escalar ubicado en el parque exterior, uno de los más grandes a cielo abierto de Latinoamérica.
Según Lozano, es la opción más completa, ya que permite disfrutar de toda la jornada en Zipaquirá, acceder a zonas verdes, tiendas, restaurantes y probar la gastronomía local.
Adicionalmente, la Catedral cuenta con “show de luces espectaculares” en la nave central, café temático, zona de suvenires y tiendas de esmeraldas, completando la jornada con alternativas de ocio y descanso.
Para los asistentes al Cundinamarca Fest, la Catedral de Sal dispuso un descuento especial del 15% en la compra de cualquier pasaporte.
Yenny Lozano señaló que la entrada adquirida con esta promoción tiene vigencia durante todo un año, permitiendo flexibilidad para organizar la visita; además, quienes realicen la compra en el stand recibirán regalos como termos, agendas y gorras.
“Queremos garantizar que todo el que compre pase por esta feria aproveche la tarifa y se lleve un recuerdo especial”, concluyó Lozano.
Más allá del atractivo turístico, para quienes integran la plantilla de la Catedral, el ingreso y permanencia en este espacio comporta una experiencia que se renueva con cada visita.