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Nidia Góngora: la voz del Pacífico que resuena en el mundo
Del Pacífico al mundo: el legado musical de Nidia Góngora
En Colombia, la música es sinónimo de historia, alegría y tradición. Si el vallenato es la esencia de la narrativa costeña, el currulao del Pacífico es su hermano de sangre. Hoy, una voz ha llevado el folclor colombiano y su cultura a escenarios internacionales: Nidia Góngora.
Desde Santa Bárbara de Timbiquí, Cauca, Nidia Góngora creció entre cantos de arrullo. Aunque su profesión inicial fue la docencia, el destino tenía otros planes para ella. Pasó de las aulas de clase a los escenarios nacionales e internacionales, llevando y preservando, a través de la música, la autenticidad de sus raíces.
Del vallenato al currulao: una misma esencia en diferentes sonidos
A simple vista, el vallenato y el folclor del Pacífico pueden parecer mundos aparte. Uno se toca con acordeón, caja y guacharaca; el otro con marimba, cununos y bombos. Sin embargo, en el fondo, ambos son manifestaciones del pueblo, con letras que narran historias de amor, lucha y resistencia.
Tal como lo hicieron Carlos Vives con el vallenato y Totó la Momposina con la cumbia, Nidia Góngora ha llevado el folclor del Pacífico colombiano a otro nivel. Su trabajo con la agrupación Canalón de Timbiquí y su colaboración con el productor británico Quantic han permitido que ritmos como el currulao lleguen a festivales internacionales y se fusionen con sonidos modernos sin perder su esencia.
Esta cantora e investigadora de la música del Pacífico ha tomado entre sus manos el currulao y los alabaos para crear piezas que narran la vida de su gente, su relación con la selva y el mar, y la identidad de su región.
Un ejemplo de ello, es "En los manglares", uno de sus más recientes sencillos y parte de la banda sonora de la película "Yo vi tres luces negras", es un llamado a la conciencia sobre la relación del ser humano con la naturaleza, atendiendo al clamor de las selvas colombianas.
Entre sus mayores logros se encuentra el álbum "De mar y río" de Canalón de Timbiquí, nominado al Grammy Latino, convirtiéndose en el primer disco del folclor del Pacífico en recibir este reconocimiento.
Top 5 canciones de Nidia Góngora que debes escuchar
Si buscas lo mejor de Nidia Góngora, estas son cinco canciones imperdibles que han marcado su carrera:
"En los manglares" – Parte de la banda sonora de "Yo vi tres luces negras", un llamado a la conciencia ambiental.
"Balada Borracha" – Tema principal del álbum "Almas Conectadas", esta colaboración entre Nidia Góngora y Quantic ha trascendido fronteras con su innovadora mezcla de cumbia y rock. La canción rinde homenaje a la tradición festiva de los bebedores en la comunidad afrocolombiana de Timbiquí, capturando su esencia y alegría a través de la música.
"Quítate de Mi Escalera Remix" – La fusión entre Prieto Riddim y Nidia Góngora transforma los sonidos tradicionales del Pacífico sur en una propuesta electrónica. Con una base de dancehall y ritmos afrocolombianos, esta versión modernizada lleva la esencia del currulao y la marimba a las pistas de baile.
"De mar y río" – Esta canción del álbum nominado al Grammy Latino encapsula la esencia del folclor del Pacífico colombiano. Con la riqueza sonora de la marimba, los cununos y los bombos, esta pieza evoca la conexión profunda entre la comunidad afrocolombiana, el agua y la naturaleza.
"Ñanguita" – Con una fusión entre el currulao y ritmos electrónicos, esta canción evoca espiritualidad, resistencia y la conexión profunda con la tierra. Representada por la marimba y los coros tradicionales que trae Nidia Góngora y Quantic, innovan en la música afrocolombiana, llevando a nuevas dimensiones el conocimiento de sus raíces.
Una voz que trasciende fronteras
Hoy, con más de 22 años de trayectoria, Nidia Góngora es el reflejo de cómo la música colombiana sigue rompiendo fronteras, sin importar el género. Así como el vallenato y la cumbia conquistaron escenarios internacionales, su voz sigue resonando, demostrando que el folclor del Pacífico es Colombia y es historia.
Porque en el fondo, ya sea con acordeón o con marimba, la música de nuestro país es una sola: la que cuenta historias y nos hace sentir orgullosos de nuestras raíces.
