

Colombia
El recorrido musical de la emisora líder reúne talento nacional, espíritu de inclusión y la tradición de la Novena en una fiesta sin igual.
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Por: Juan Manuel Arias Montenegro
Creativo Digital

Olímpica Stereo Bogotá, la emisora número uno de Bogotá, avanza con su tradicional Ruta de la Navidad en la ciudad.
Este recorrido, que comenzó el 16 de diciembre de 2025, lleva música en vivo, villancicos y alegría a distintas localidades, marcando el ambiente decembrino con una serie de eventos gratuitos.
El Trineo Olímpica recorrerá diferentes calles y barrios hasta el 23 de diciembre, acompañado por la entrega de la reconocida Novena Olímpica entre los asistentes y artistas de talla nacional.
El sexto día de las novenas, correspondiente al 21 de diciembre, cuenta con una jornada especial con dos conciertos simultáneos en puntos estratégicos de la capital.

En la localidad de Bosa, el Parque Metropolitano Porvenir, ubicado en la carrera 80 I No. 61 - 05 Sur, será el epicentro de la celebración con las presentaciones del cantante Ciro Quiñonez, el artista Rafael Santos y la agrupación Iván y su Bam Band.
Mientras tanto, en Suba, el público podrá disfrutar del evento en el Parque Fontanar del Río, en la diagonal 147 # 141 A - 42. Allí, desde las 5:00 p. m., el escenario estará a cargo de Jhon Alex Castaño, Los Chiches Vallenatos y Estrellas Orquesta, quienes interpretarán sus éxitos para los asistentes y familias del sector.

En ambos parques, la participación es libre y gratuita, reforzando el espíritu de inclusión y festividad que caracteriza a la Ruta de la Navidad de Olímpica Stereo.
Como parte central de la jornada, se compartirá con los asistentes la oración correspondiente al sexto día de la novena, una tradición que une a los barrios bogotanos en torno a la espiritualidad y el mensaje de Navidad:
*Jesús había sido concebido en Nazaret, domicilio de José y María, y allí era de creerse que había de nacer, según todas las probabilidades. Más Dios lo tenía dispuesto de otra manera, y los profetas habían anunciado que el Mesías nacería en Belén de Judá, ciudad de David.
Para que se cumpliese esta predicción, Dios se sirvió de un medio que no parecía tener ninguna relación con este objeto, a saber: la orden dada por el emperador Augusto de que todos los súbditos del imperio romano se empadronasen en el lugar de donde eran originarios. María y José como descendientes que eran de David, estaban obligados a ir a Belén.
No ignoraba Jesús en qué lugar debía nacer y así inspira a sus padres que se entreguen a la Providencia, y que de esta manera concurran a la ejecución de sus designios. Almas interiores, observad este manejo del Divino Niño, porque es el más importante de la vida espiritual: aprended que el que se haya entregado a Dios ya no ha de pertenecer a sí mismo, ni ha de querer si no lo que Dios quiera.*
La novena de este 21 de diciembre retoma el pasaje de Isaías 9:6: “Porque un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado”, subrayando la importancia de la humildad y la fragilidad en la celebración cristiana.
El mensaje de reflexión destaca cómo la pequeñez vence a la opulencia humana y renueva el sentido de la Navidad como momento de gracia y esperanza: "El Niño es la promesa de Dios que quiere comenzarlo todo desde el primer momento, que quiere incorporarse a la historia humana y hablarnos desde una cuna".
La súplica confiada también será parte del acto: "Ven, Niño tan precioso y dicha del cristiano. Los pequeños, los pobres, los últimos, quieren ver su rostro sufrido y doliente reflejado en tus pupilas llenas de amor; en cada niño, en cada corazón humilde queremos encontrarte, consolarte, sanar las heridas de la injusticia y el desamor. Ven Señor, ven pequeño maestro de humanidad, ven niño que quieres que nos hagamos pequeños para poderte acoger y para poderte amar. Amén".