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Conozca las normas y recomendaciones para viajar con su mascota en bus en Colombia. Requisitos legales, salud y bienestar para un viaje sin contratiempos.
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Creativo Digital
El viaje con animales de compañía se ha convertido en una prioridad para miles de familias que desean disfrutar de sus vacaciones sin dejar atrás a sus perros o gatos. Sin embargo, los desplazamientos terrestres durante la temporada alta requieren de una planeación minuciosa para cumplir con las leyes de transporte vigentes y, sobre todo, para garantizar que el bienestar del animal no se vea comprometido por el estrés o el calor.
En Colombia, la Superintendencia de Transporte establece que las empresas prestadoras del servicio no pueden negarse arbitrariamente al traslado de mascotas, pero sí tienen la potestad de imponer condiciones de seguridad estrictas. Es fundamental portar siempre el carné de vacunación original y actualizado, el cual debe ser presentado al momento de abordar para certificar que el animal no representa un riesgo de salud pública.
Cada empresa de transporte terrestre tiene políticas internas específicas respecto al tamaño y el peso permitido dentro de la cabina de pasajeros. Por lo general, los animales de raza pequeña pueden viajar a los pies de su dueño siempre que estén dentro de un guacal rígido o de tela resistente. Para mascotas de gran tamaño, las condiciones pueden variar, exigiendo en algunos casos su ubicación en compartimentos ventilados y seguros destinados especialmente para ellos.
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Antes de emprender un viaje de larga distancia, es indispensable realizar una visita al veterinario para confirmar que el estado de salud de la mascota es óptimo para el trayecto. Se debe evitar la administración de sedantes o tranquilizantes sin una prescripción médica clara, ya que estos medicamentos pueden alterar el ritmo cardíaco y la temperatura corporal del animal durante las horas de carretera, generando riesgos innecesarios.
La alimentación también juega un papel crucial en la comodidad del viaje. Lo más recomendable es que el perro o gato haya ingerido una comida ligera al menos cuatro horas antes de partir para prevenir mareos y vómitos dentro del vehículo. Realizar un paseo largo y vigoroso antes de llegar a la terminal de transporte ayudará a que el animal esté más relajado y propenso a descansar durante la mayor parte del recorrido.
Durante las paradas técnicas o los descansos programados por el conductor, es vital permitir que la mascota salga del guacal, se hidrate y realice sus necesidades fisiológicas. Siempre debe mantenerse el uso de la correa y el collar con una placa de identificación que incluya un número de contacto actualizado. Esto es especialmente importante en lugares concurridos como las terminales, donde el ruido y el movimiento pueden asustar al animal.
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Llevar un kit de limpieza rápida con toallitas húmedas, bolsas para desechos y un atomizador con agua fresca facilitará el manejo de cualquier imprevisto de forma higiénica y rápida. Mantener una actitud tranquila y hablarle suavemente a la mascota en momentos de mucha vibración o ruido ayudará a reducir su ansiedad, logrando que la experiencia de viaje sea agradable tanto para los dueños como para los demás viajeros.
Viajar con mascotas es una responsabilidad que fortalece el vínculo familiar cuando se realiza de manera organizada. Informarse previamente sobre las políticas de la empresa de transporte y priorizar el confort del animal asegura que las vacaciones comiencen y terminen de la mejor forma posible, sin contratiempos ni riesgos para la salud de nuestros compañeros de cuatro patas.
