Colombia
Este valor fue definido por decreto. Así lo anunció el presidente de Colombia en su alocución del 29 de diciembre. Sumado con el subsidio de transporte, la cifra asciende a dos millones de pesos.
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Por: Equipo de Redacción
Redacción Digital
El presidente Gustavo Petro anunció, en la noche del 29 de diciembre, la cifra oficial para el salario mínimo que regirá a partir del primero de enero. Con un aumento que él calificó como histórico, el mandatario formalizó el monto que pretende ser un piso de dignidad para las familias trabajadoras.
El salario mínimo para el año entrante no se pactó en el escenario tradicional de concertación entre gremios y trabajadores. El gobierno nacional optó por fijarlo mediante decreto, basado en el concepto de “salario mínimo vital familiar” que, según el presidente, está ordenado por la Constitución de 1991 y por convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El presidente Petro explicó que el cálculo consideró variables como la inflación y la productividad del trabajo. Sin embargo, el factor central fue el costo de la canasta familiar para un hogar promedio colombiano, el cual estimó en poco más de tres millones de pesos. Con un promedio de 1.5 trabajadores por familia, la operación matemática arrojó la nueva cifra base.
La decisión se enmarca en la doctrina del “salario vital”, un concepto que el mandatario relacionó con la doctrina social cristiana y la encíclica Rerum Novarum. Petro afirmó que este enfoque prioriza el ingreso del trabajador como generador de riqueza y demanda interna, más que como un simple costo para las empresas.
El decreto presidencial establece el salario mínimo mensual para 2026 en $2.000.000, cifra que incluye el auxilio de transporte. Este monto representa un incremento nominal del 23.78% con respecto al vigente en 2025. El auxilio de transporte sube a un valor de $253.118, lo que significa un aumento del 24.5%.
Para los trabajadores que no reciben auxilio de transporte, el salario base vital quedó fijado en $1.746.882. Según el presidente, el aumento real, una vez descontada la inflación proyectada, sería de un 18.7%. Petro destacó que este incremento real supera la sumatoria de los aumentos reales de los tres años anteriores de su gobierno.
El mandatario anticipó críticas de algunos sectores económicos, pero defendió la medida. Argumentó que un mayor poder adquisitivo para la base de la población estimula la demanda, beneficia al comercio y a la economía popular, y puede generar más empleo. Reiteró que el objetivo final es disminuir la desigualdad y construir paz social.
El anuncio del 29 de diciembre marca un hito en la política salarial del país. Por primera vez, el gobierno aplica por decreto la figura del salario mínimo vital familiar, con un aumento porcentual sin precedentes en décadas. La medida busca transferir poder de compra a los hogares y reactivar la economía desde la base.
Sus efectos sobre el empleo, la inflación y la actividad de las pymes serán observados con detalle en el transcurso del año próximo. El gobierno confía en que este mayor ingreso se traduzca en más ventas para los negocios y, por ende, en un círculo virtuoso de crecimiento. El decreto ya es una realidad y regirá los ingresos de millones de colombianos a partir del primer día del 2026.
