Colombia
Quedar varado por una llanta desinflada es más común de lo que parece. Le contamos cómo resolver esta situación sin riesgos y cuándo es mejor pedir ayuda profesional.
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Por: Equipo de Redacción
Redacción Digital
Un pinchazo en la llanta puede ocurrir en cualquier momento y dejarle varado en la carretera. Aunque es una situación frustrante, mantener la calma y seguir los pasos correctos garantiza su seguridad y evita daños mayores al vehículo. A continuación, le explicamos cómo actuar ante este imprevisto.
Si nota que la llanta se desinfla mientras maneja, reduzca la velocidad y busque un área alejada del tráfico. En carreteras, prefiera estaciones de servicio o zonas de emergencia; en ciudad, elija un lugar plano y visible. Evite detenerse en curvas o pendientes.
Mantenga el volante firme para controlar la dirección y no frene bruscamente. Una parada abrupta puede desestabilizar el vehículo, especialmente a alta velocidad. Una vez estacionado, active el freno de mano para mayor seguridad.
Al detenerse, encienda las luces intermitentes para alertar a otros conductores. Si es de noche, use también las luces de posición. Coloque triángulos reflectivos o señales de peligro a 50 metros de distancia si está en una vía rápida.
Permanezca dentro del auto si está en una zona peligrosa, como una autopista con tráfico denso. Si debe salir, hágalo por el lado contrario al flujo vehicular y manténgase alejado de la calzada.
Revise la llanta para determinar si tiene un pinchazo pequeño o un daño mayor, como un reventón. Si cuenta con una llanta de repuesto y las herramientas necesarias (gato, cruceta y desarmador), proceda a reemplazarla. Asegúrese de que la superficie sea estable antes de usar el gato.
Si el daño es grave o no tiene repuesto, evite manipular la llanta. Conducir con ella desinflada daña la rueda y el sistema de suspensión.
Si no puede cambiar la llanta usted mismo, es mejor solicitar asistencia profesional. Llame a su servicio de grúa o asistencia vial incluido en el seguro. Si no tiene cobertura, contacte a un taller cercano o a la policía de tránsito. Proporcione detalles de su ubicación con puntos de referencia o aplicaciones como Google Maps.
Mientras espera, no acepte ayuda de desconocidos. Si un extraño se detiene, permanezca en el auto con las puertas cerradas y pida que contacten a las autoridades.
Una vez solucionado el imprevisto, lleve el vehículo a un especialista. Un pinchazo pequeño puede repararse, pero si el neumático tiene cortes profundos o el daño está en el flanco, necesitará un reemplazo. No reutilice la llanta de repuesto (excepto si es de tamaño estándar).
Para evitar futuros incidentes, revise la presión y el desgaste de las llantas cada mes. Evite objetos punzantes en la vía y no sobrecargue el auto.
Un pinchazo no tiene que convertirse en un problema mayor si actúa con prudencia. Priorice su seguridad, siga estos pasos y mantenga su vehículo en óptimas condiciones. La preparación y el conocimiento son clave para manejar imprevistos en la carretera.
