Colombia
Una renovación que honra la tradición y abre un nuevo capítulo para la fiesta más grande de Colombia. Aquí te contamos y te mostramos cómo fue su presentación oficial.
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Por: Equipo de Redacción
Redacción Digital
En la Casa del Carnaval, entre tambores, colores vivos y un ambiente cargado de orgullo caribe, el Carnaval de Barranquilla presentó la renovación de su marca institucional. El anuncio celebró un momento clave para una de las fiestas patrimoniales más importantes del país, que decidió actualizar su identidad sin romper el lazo con su tradición.
El protagonista del lanzamiento fue el torito. Ese símbolo que todos los barranquilleros reconocen desde niños retomó el centro de la escena, ahora liberado del círculo que lo enmarcaba y con un diseño que invita a imaginarlo en movimiento. El torito Ribeño, una de las máscaras más antiguas del Carnaval, continúa siendo el corazón visual de la fiesta.
Los estudios previos confirmaron que el torito permanece como el elemento con mayor recordación en la ciudadanía. Por eso, la renovación no lo reemplaza, sino que lo amplifica. Conserva la estrella en la frente, los ojos expresivos y los cascabeles, además de los colores de la bandera de Barranquilla, ahora integrados con un enfoque más contemporáneo.
El cambio no busca alterar la identidad del Carnaval, sino fortalecerla. La nueva imagen refleja dinamismo, creatividad y una proyección global que se alinea con la evolución cultural de la fiesta.
Durante el lanzamiento, la cuenta oficial @carnavalbaq compartió una animación donde el torito aparece acompañado de música, tambores y dibujos que resaltan la esencia folklórica del Carnaval. La pieza celebra un mensaje central: la marca crece, pero su raíz permanece intacta.
La nueva identidad visual permite un uso flexible en plataformas digitales, piezas audiovisuales, entornos físicos y aplicaciones institucionales. Consolida una imagen fresca, moderna y fiel a las narrativas que el Carnaval quiere proyectar: alegría, orgullo, colectividad e innovación cultural.
Para Juan José Jaramillo, director de Carnaval de Barranquilla, esta transformación simboliza una identidad viva. “La nueva imagen honra la tradición y respeta el inmenso valor de nuestra cultura. Así como el Carnaval de Barranquilla es una identidad abierta a transformarse, siendo siempre fiel a su esencia; de esta manera hoy nos renovamos para seguir creciendo y proyectándonos al mundo”, afirmó.
Sus palabras apuntan a un equilibrio esencial: preservar la esencia mientras se adapta el lenguaje visual a un público global y a nuevas plataformas.
El refresh de la marca corporativa nace del proyecto Apoyo al Carnaval de Barranquilla, Economías Creativas y Culturales, desarrollado junto al Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF). La investigación permitió identificar oportunidades para fortalecer la imagen institucional y posicionarla como referente de innovación, tradición y competitividad cultural.
La renovación se convierte en una apuesta por consolidar la visibilidad internacional del Carnaval y reforzar el vínculo con los hacedores que mantienen viva esta celebración cada año.
El Carnaval de Barranquilla avanza hacia una nueva etapa visual sin desprenderse de su alma. El torito, ahora libre y vibrante, simboliza una fiesta que se transforma con el tiempo, que celebra a su gente y que sigue siendo motivo de orgullo para Colombia.
El mensaje es claro: la esencia permanece. Y quien lo vive, siempre lo goza.
