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Desde una edad temprana, Jhon Alex Castaño soñaba con convertirse en cantante. Sin embargo, debido a la difícil situación económica de su familia, tuvo que postergar ese sueño durante varios años. A los 10 años, Castaño tomó una decisión drástica que cambiaría el curso de su vida: se escapó de su casa en Balboa, Risaralda.
Castaño describe su infancia como rebelde, lo que lo llevó a abandonar su hogar a una edad temprana. Su destino fue Virginia, Risaralda, donde comenzó a ganarse la vida tocando la guitarra y cantando canciones. Sin embargo, no siempre podía subsistir solo del canto, por lo que tuvo que buscar otras maneras de ganarse la vida.
Proveniente del campo y con fuertes raíces campesinas, Castaño no tuvo reparos en trabajar en la plaza de mercado de Virginia. Allí, empezó lavando papas y frutas, un trabajo que le proporcionaba no solo ingresos sino también comida. “Ya a las 5 de la mañana había tinto, arepita, huevito. Entonces no solo ganaba platica, sino que también comida”, recuerda el cantante.
Gracias a sus diversos trabajos y lo que ganaba con sus interpretaciones ocasionales, Castaño logró ahorrar dinero. Con estos ahorros, decidió comprarse una bicicleta, lo que le permitió hacer mandados por toda la Virginia, aumentando así sus ingresos.
Todo esto sucedió cuando el intérprete de ‘Déjala que se Vaya’ era apenas un niño. A pesar de las dificultades, nunca dejó de perseguir su sueño de ser cantante, demostrando una determinación y resiliencia admirables desde temprana edad.
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